Los buenos tiempos del Opel Meriva
El tiempo de producción de los vehículos es algo bastante semejante a la vida humana: mientras un interés sostenga las cosas, estas perduran. Ya cuando prima el desinterés todo comienza a mermar en la vida, y una vez que un vehículo no da los dividendos necesarios en el mercado, pues sencillamente tiene sus días contados.
El Opel Meriva ha sido uno de esos monovolúmenes que produjeron grandes ventas y han provocado el agradecimiento de los clientes por su fiabilidad mecánica. Vale recordar que siempre fue uno de los coches más espaciosos y flexibles de su segmento, con múltiples ajustes de asiento. Transitar en las ciudades resultó uno de sus objetivos principales producto de su tamaño compacto y buena visibilidad desde su interior.
Ahora puede parecer a cualquiera una reliquia valiosa circulando por nuestras vías. Su motor diesel 1.7 CDTI de 100 CV consume 5.4 l/100 km, mientras que el gasolina 1.6 de 105 CV anda por esa misma cantidad, lo que siempre hace pensar que este último es una opción mejor.
Con este motor se logra una potencia y unas prestaciones más que suficientes para trayectos urbanos e interurbanos, es más barato de adquirir y su mantenimiento siempre resulta más asequible. Recordemos que una vez que un coche está al borde de su liquidación, los precios descienden vertiginosamente, por ello este Opel Meriva, con el acabado Plus saldría por 15.200 euros, sin añadir posibles descuentos.
Claro, si se le une el equipamiento opcional ya es más caro (un paquete que incluye los importantes airbags de cortina, control de distancia de aparcamiento y reposacabezas activos cuesta 550 euros). Pero, no obstante, es valioso la que se vende de serie: ABS + EBD, ordenador de a bordo, aire acondicionado, antinieblas, radio CD y manos libres Bluetooth para el teléfono móvil, llantas de aleación de 16 pulgadas, volante forrado en cuero, entre otros elementos.
